Versión escrita
Una vez que sepas en qué quieres invertir, el siguiente paso es emplazar una orden. Es posible que te sorprendas al ver que hay más opciones que simplemente comprar o vender. En cambio, puedes elegir entre diferentes tipos de orden que tienen como objetivo darte más control a la hora de operar. Pero, ¿cómo funciona exactamente esto y cuáles son los diferentes tipos de órdenes disponibles?
La orden más utilizada es una orden limitada. Con este tipo de orden, indicas la cantidad de acciones que deseas comprar o vender, y el precio máximo al que estás dispuesto a realizar la operación. Supón que deseas comprar 100 acciones de la compañía ABC. El precio en ese momento es de 35€ por acción, pero solo estás dispuesto a pagar un máximo de 33 €. En este caso, puedes emplazar una orden limitada de 100 acciones a un precio de 33€ por acción. Si el precio de la acción cae a 33€ o menos, tu orden será enviada para su ejecución al mejor precio disponible.
Por tanto, la principal ventaja de las órdenes limitadas es que siempre sabes cuál sería el precio máximo si deseas realizar una compra. Sin embargo, también puede darse el caso de que el precio nunca llegue a 33€. Por tanto, si intentas realizar una compra con una orden con un límite muy bajo, puede llevar tiempo en ejecutarse e incluso no llegar a ejecutarse. Cuanto más se acerque la orden al precio actual, más probable será recibir una ejecución más rápida.
Pero también hay tipos de órdenes más avanzadas, como la orden a mercado. Con este tipo de orden, solo se indica la cantidad de acciones que se comprarán o venderán. No indicas un precio, sino que la orden se ejecutará al mejor precio disponible en ese momento. Supongamos que emplazas una orden a mercado para comprar 100 acciones de la compañía ABC. Si el precio es de 35€ en ese momento y hay 100 acciones disponibles por este precio, tu orden se ejecutará de inmediato a un precio de 35€ por acción.
También puedes emplazar una orden cuando el mercado está cerrado. En este caso, la orden se enviará al mercado una vez este vuelva a abrir. Ten en cuenta que el precio que recibes al día siguiente puede variar del precio de cuando emplazaste la orden. Por ejemplo, si hay noticias positivas que surgen durante la noche sobre ABC, la acción puede empezar cotizando a 40€ por acción a la mañana siguiente. En ese caso, con una orden de mercado, comprarías 4.000€ de las acciones a la mañana siguiente. Por supuesto, aún puedes eliminar la orden antes de que el mercado vuelva a abrir a la mañana siguiente.
También hay tipos de órdenes que se pueden usar para responder ante cambios en el mercado. Por ejemplo, si tienes una posición de 100 acciones en ABC y quieres protegerte de una caída de precios, puedes colocar una orden stoploss. Pongamos que el precio actualmente es de 35€ por acción y deseas vender la posición si el precio baja. Para ello, puedes emplazar una orden stoploss con un precio de stop de 30€. De esa manera, si el precio cae a 30€ o menos, tu orden se enviará al mercado como una orden a mercado. Este tipo de orden es útil si no puedes seguir el mercado en todo momento.
Sin embargo, también debes tener en cuenta que es posible que tu orden se ejecute por menos de 30€. Digamos que hay malas noticias sobre ABC fuera del horario de mercado, lo que hace disminuir el precio de apertura a 20€ a la mañana siguiente. Esto significaría que tu posición se vendería como una orden a mercado a 20€ por acción.
¿Qué sucede si crees que la fuerte disminución explicada en el ejemplo anterior se corregirá? Digamos que te gustaría vender si el precio de la acción cae por debajo de 30€, pero quieres recibir al menos 25€ por acción en la venta. Para ello, puedes colocar una orden stop limitada. Si el precio cae por debajo del precio de stop de 30€, esto activará la orden como una orden limitada con un precio de venta mínimo de 25€.
Además de los diversos tipos de órdenes, una opción final a considerar es la duración de la orden. Con una orden del día, tu orden es válida solo para la actual sesión de mercado. Si la orden no se ejecuta a cierre de mercado, esta expirará y se eliminará de tu cuenta. Por otra parte, puedes emplazar una orden permanente o GTC (Good-Till-Cancel) que dejarás abierta permanentemente hasta su ejecución.
En la próxima lección discutiremos la construcción de tu cartera y te mostraremos cómo puedes limitar el riesgo.
Nota:
Invertir conlleva riesgos. Puedes perder (parte de) tus fondos invertidos. Te sugerimos que inviertas únicamente en instrumentos financieros que se ajusten a tus conocimientos y experiencia. Esto no es un consejo de inversión.
Invertir conlleva riesgos.
Queremos hacer que todos se conviertan en los mejores inversores que puedan llegar a ser. Al ofrecer un universo de opciones y posibilidades en nuestra plataforma de inversión, estamos eliminando las barreras para hacer que la inversión sea accesible para todos: novatos o expertos. Ahora tienes acceso a una gran variedad de productos de inversión en más de 50 bolsas, para que inviertas como tú quieras. Con nosotros, no tienes por qué pagar de más. Por eso, sin comprometer ni un poco en la calidad, la seguridad y la variedad de nuestros servicios de inversión, ofrecemos tarifas bajas. Dar prioridad a las necesidades de nuestros clientes nos ha ayudado a convertirnos en el bróker líder en Europa. Nuestros más de 2,5 millones de inversores y más de 90 premios internacionales son la prueba de nuestro esfuerzo.